Saltar al contenido

Pizza con base de calabacín al horno

    Pizza con base de calabacín al horno

    Prepárate para saborear una deliciosa y saludable alternativa a la clásica pizza: la pizza con base de calabacín al horno.

    Olvídate de la masa tradicional y descubre cómo este versátil vegetal puede convertirse en la base perfecta para tu pizza favorita.

    Con cada bocado, disfrutarás de una explosión de sabores frescos y nutritivos que te dejarán satisfecho y lleno de energía.

    El calabacín, con su suave textura y sabor delicado, se transforma en una base ligera y crujiente que combina a la perfección con los ingredientes clásicos de la pizza.

    ¿Te imaginas disfrutar de una pizza deliciosa sin la culpa de los excesos calóricos? Con esta pizza fitness, puedes hacerlo realidad.

    ¡Esta pizza de calabacín y huevo está lista para convertirse en tu nueva favorita!

    Ingredientes

    • Calabacín grande (masa) 1 ud
    • Huevo M (masa) 1 ud
    • Harina de avena (masa) 50 g
    • Mozzarella rallada (masa) 50 g
    • Sal (masa) 5 g
    • Mozzarella rallada 200 g
    • Pasta de tomate 1 cdta
    • Queso de rulo de cabra (rodajas) 6 ud
    • Hojas de rúcula
    • Tomates cherry
    • Orégano

    ¿Cómo hacer una pizza fitness con base de calabacín al horno?

    1. Lo primero es preparar la base. Pelaremos y cortaremos el calabacín, quitándole la parte blanda con semillas del centro. Sobre un colador, rallaremos el mismo, y presionaremos con el puño tratando de eliminar toda el agua que contiene.
    2. Podemos espolvorear un pellizco de sal, lo que ayudará a que sude un poco más, eliminando más rápidamente la humedad. Lo secaremos bien con papel de cocina y meteremos en un bol, junto al resto de ingredientes de la masa.
    3. Dispondremos la mezcla totalmente homogeneizada sobre un papel de hornear o silpat, describiendo la forma que más nos guste. Con una espátula o cuchara, iremos aplanando la masa, hasta dejarla con un grosor no superior a los 0,5 cm.
    4. Entretanto, iremos precalentando el horno a 200 °C, con calor arriba y abajo, o función pizza, si nuestro horno la tuviera. Introduciremos la base sobre una bandeja a altura media, y hornearemos unos 15 – 18 min, o hasta que esté ligeramente dorada.
    5. Transcurrido el tiempo, sacaremos del horno, y colocaremos el resto de los ingredientes en el siguiente orden. Antes de nada, la pasta de tomate, que debe quedar perfectamente extendida y en la cantidad justa, o la masa se humedecerá demasiado.
    6. Seguidamente, el orégano, ya que, al estar seco, si lo echáramos al final, como muchos acostumbran, acabaría quemándose. Continuaremos con la mozzarella, las rodajas de queso de rulo de cabra, y unos tomatitos cherry partidos a la mitad.
    7. Opcionalmente, añadiremos un fino hilo de aceite de oliva virgen extra. La introduciremos en el horno a 220 º por un tiempo de 5 o 6 minutos, tras los cuales, la sacaremos para rematarla con unas hojas de rúcula.

    Información nutricional por cada 100g

    NutrienteCantidad (por cada 100g)
    Calorías146 kcal
    Grasas totales7.5 g
    Grasas saturadas4.4 g
    Colesterol25 mg
    Sodio321 mg
    Carbohidratos9.4 g
    Fibra1.4 g
    Azúcares1.7 g
    Proteínas10.7 g